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La ley brasileña establece que las reglas que se utilizarán en el inventario y reparto de bienes serán las que surjan del domicilio de la persona fallecida
Sin embargo, cuando el fallecido tiene activos en el exterior, hay algunas disposiciones que deben observarse, especialmente en lo que respecta al pago de impuestos, para que los activos no estén totalmente comprometidos con el pago de estos valores.
En este artículo te acercaremos los principales aspectos de la sucesión patrimonial en el exterior y qué medidas se pueden adoptar para la mejor planificación sucesoria y, principalmente, para que los herederos puedan llevar a cabo el reparto con la menor carga posible.
En primer lugar, la sucesión de la herencia dependerá de la estructura del activo a transferir.
Sin embargo, la regla general es: el inventario debe abrirse en Brasil, si la persona cuyo domicilio está en Brasil y las reglas aplicadas es del país referido.
Una vez finalizado el proceso de inventario en Brasil, el proceso debe ser traducido a través de un traductor jurado y, a partir de ahí, se abrirá el inventario en el país donde se encuentran las mercancías, que se dictará desde el proceso de inventario en Brasil.
Pasada esta etapa, se transfieren los activos y, así, se finaliza el proceso de sucesión patrimonial.
Si bien en la descripción el proceso puede parecer simple, dichos procesos pueden llevar años, gracias a la lentitud del poder judicial brasileño y también a los problemas que surgen del país donde se encuentran los activos.
Tal retraso puede generar perjuicios a los herederos, ya que los activos tienden a devaluarse, según su origen. Por eso es sumamente importante que la planificación de la sucesión se realice con anticipación, ya que existen inversiones, como la creación de un holding familiar, que permiten a los herederos acceder al patrimonio sin tener que completar el inventario.
Es de destacar que, aunque el ciudadano tenga residencia en el exterior, pero posea bienes en Brasil, respecto de los bienes referidos, estos deben ser inventariados aquí en el país.
La doble imposición es uno de los mayores problemas en el inventario de bienes en el exterior. Si bien el artículo 155 de la Constitución Federal prohíbe el cobro de ITCMD en activos ubicados en el exterior, la jurisprudencia brasileña no tiene un entendimiento pacífico de la posibilidad de cobrar el impuesto sobre los activos ubicados en otros países.
Así, en el caso de la transferencia de bienes ubicados en el exterior, los herederos deben pagar los impuestos recaudados aquí en Brasil, los honorarios resultantes del proceso judicial, además de los honorarios legales.
En el país donde se ubican los activos, las partes deben prestar atención a las reglas del país en cuestión, donde, en general, al igual que Brasil, los Estados suelen cobrar impuestos y tarifas por la transmisión, sin olvidar los honorarios de los abogados calificados para Representar a los herederos en el proceso desde el exterior.
La doble imposición es uno de los mayores problemas en el inventario de bienes en el exterior. Si el artículo 155 de la Constitución Federal prohíbe el cobro de ITCMD sobre activos ubicados en el exterior, la jurisprudencia brasileña no tiene un entendimiento pacífico de la posibilidad de cobrar impuestos sobre activos ubicados en otros países.
Por lo tanto, en el caso de la transferencia de activos ubicados en el exterior, los herederos deben pagar los impuestos recuperados aquí en Brasil, los honorarios resultantes del proceso judicial, además de los honorarios legales.
En el país desde donde los activos son ubicuos, las partes deben prestar atención a las reglas del país en cuestión, desde donde, en general, como Brasil, los Estados suelen cobrar impuestos y tasas por la transmisión, sin olvidar los honorarios de los abogados. calificado para representar a los herederos en el proceso desde el exterior.
Con base en un plan de sucesión realizado por un experto, es posible reducir el pago de impuestos de transmisión, honorarios judiciales y honorarios de abogados.
El establecimiento de un holding familiar en el extranjero es una de las formas más habituales de saltarse esta etapa. Los activos del individuo pueden invertirse en este modelo de empresa, con el fin de expandir las ganancias de la institución en otro país, sin comprometer la mayoría de los valores en compartir.
¡La asistencia de un abogado especialista es fundamental en este paso!
